O sea, “feitos na casa”,
“hechos en casa”... al gusto.
Tenía por ahí cuatro vasos
de plástico rígido de esos que vienen de regalo con las botellas. Me daba pena
tirarlos, pero tampoco veía qué uso darles.
Y aquí están, reconvertidos en un juego de floreros blancos en plan minimalista, con ayuda de aironfix blanco y un cúter:
Los tengo decorando el
vestíbulo, con flores secas de los chinos. ¿A que dan el pego?
Una idea de reciclaje que puede venir bien en cualquier momento: floreros, macetas, portalápices...
Nota: este minitutorial lo publiqué inicialmente en el blog Cluberas.
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